La humanidad esta podrida y los hospitales están llenos de enfermos sin nombre y sin solución. Enfermaron de ver día a día una sociedad sucia rota y desigual, donde amar el color es ilegal y las lineas irregulares solo se aceptan cuando sirven para girar 180º a aquellos que van en contra y los vuelven al camino recto establecido.
Sus órganos son de un gris ceniza que cubre la sangre y provoca violentos espasmos de odio ante los intentos incansables de esta para mostrar-se roja a la luna de la realidad.
Donde dicen que solo hay sueños, esos que se sirven del Sol para dejar ciegos al resto y contar que los colores nunca existieron en la Tierra que anhelan poseer, cuentan que solo se ven en un lugar donde el billete de ida se debe comprar en sus bolsillos, con un dinero que solo ganan los que se resignan en creer en sus mentiras y a seguir sus lineas rectas que llevan a la humanidad a una penosa destrucción.
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